Monseñor Édgar Aristizábal Quintero asumió, el pasado viernes 19 de julio, el liderázgo de la Diócesis de Duitama-Sogamoso, tras siete años de servicio en la Diócesis de Yopal. La ceremonia se celebró en la Catedral San Lorenzo Mártir de Duitama y fue presidida por el Nuncio Apostólico, Monseñor Paolo Rudelli.

La ceremonia contó con la participación de 26 obispos de diferentes regiones del país, más de 130 sacerdotes, diáconos, religiosos, autoridades municipales y cientos de fieles, todos reunidos para dar la bienvenida a su nuevo pastor. Monseñor Aristizábal se convierte así en el sexto obispo de esta diócesis, que abarca 26 municipios de Boyacá.

En su homilía, Monseñor Aristizábal expresó su gratitud y asumió con fe y humildad su nueva misión pastoral. Recordó la importancia de la vocación cristiana y la necesidad de trabajar por la vida y la dignidad. También destacó la profunda religiosidad popular de la diócesis y la necesidad de continuar con la misión evangelizadora.

El evento tuvo momentos significativos como la lectura del Decreto Papal de Nombramiento, la entrega del Báculo Pastoral y el asentamiento en la cátedra, simbolizando la asunción oficial de su liderazgo diocesano.

El padre Óscar Pinzón, quien ejerció como administrador de la diócesis durante el tiempo de sede vacante, dio la bienvenida a Monseñor Aristizábal, resaltando la riqueza social y pastoral de la diócesis y la importancia de la misión conjunta.

“Si este tiempo de sede vacante hasta su llegada fue vivido como un Adviento por la Iglesia diocesana, esperamos que este nuevo amanecer sea todo un “kairós”. Precisamente como tiempo de gracia hemos vivido estos días de espera que nos han separado de su llegada. La Providencia nos ha permitido conocer por primera vez en nuestra historia, el ministerio de un administrador diocesano, el aquí suscrito en esta administración. Y hemos aprendido a caminar colegiadamente, hoy diríamos sinodal. Este ejercicio me ha permitido personalmente con figurarme más aún con Jesucristo, Pastor de misericordia, por medio de la escucha y de la paciencia, sobre todo de la paciencia. Quisiera agradecer a mis hermanos presbíteros y de manera especial al Colegio de Consultores. Pido perdón por las faltas cometidas y me pongo a disposición de mi nuevo pastor”, expresó el presbítero.

Monseñor Aristizábal agradeció a la comunidad de Yopal por su apoyo y pidió oraciones para su nueva misión. Invitó a todos a trabajar juntos en comunión y sinodalidad, siguiendo la guía de Cristo, el Buen Pastor.